Una curiosidad:
"Pocas personas habrán dejado de reparar en la Exposición en el vendedor automático, curiosidad tan interesante como meritoria. Un buzón metálico para una moneda de cinco céntimos. Tiradla dentro, y el vendedor automático os dará una caja de cerillas. Esto se ve en la nave octava del palacio de la industria.
Cerca del buzón hay un cartel que advierte al público que si la moneda de cinco céntimos es falsa, aunque tenga igual peso que la legítima, no podrá, como quien dice, digerirla, y por lo tanto la devuelve sin dar la mercancía. Se ha practicado la experiencia muchísimas veces con asombro de todos.
El vendedor automático, fruto de la inteligencia y extrema habilidad mecánica de un acreditado fabricante de cerillas de Gracia, el señor Molet, puede vender otros objetos por el valor de cinco céntimos y, si su autor logra dar mayor amplitud a su invento, causará una revolución en el comercio. De ahora en adelante, los dependientes tendrán que buscar otra ocupación, el tiempo precioso y la saliva que parroquianos y parroquianas pierden unos con otros lo ahorrarán comprando directamente al autómata, invento del señor Molet."
"LA ILUSTRACIÓ CATALANA" (30/XI/1888)*
Al final, no fue para tanto.
*Així s'escrivia el nom de la revista; almenys açò diu la Viquipèdia, i la pròpia font no ho escriu d'una altra manera. Ara diríem La Il-lustració Catalana.
Saludos
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