Buenísima película de George Clooney ('Good night, and good luck', 2005, USA) que nos sitúa en los Estados Unidos de los años 50, contándonos la historia real del enfrentamiento del reputado presentador de la CBS Edward R. Murrow (encarnado por un genial David Strathairn) , con el senador McCarthy y su "caza de brujas".
Interesante para ver el clima de cruzada histérica contra el comunismo imperante en la época y sobre todo para reflexionar sobre el papel de los medios de comunicación en la sociedad democrática y el del mismo pueblo a la hora de cerrar los hojos a la verdad.
Como dicen citando a los personajes de la obra Julio César de Shakespeare: "No debemos culpar a las estrellas, sino a nosotros mismos".
O lo que es lo mismo: aprendamos a pensar de manera autónoma y recordemos que, si bien debemos acudir a las fuentes de información (ya sean libros, televisión, prensa, radio, declaraciones de nuestros políticos...) para vivir despiertos, estas pueden hallarse emponzoñadas por intereses manipuladores y poco democráticos.
O lo que es lo mismo: aprendamos a pensar de manera autónoma y recordemos que, si bien debemos acudir a las fuentes de información (ya sean libros, televisión, prensa, radio, declaraciones de nuestros políticos...) para vivir despiertos, estas pueden hallarse emponzoñadas por intereses manipuladores y poco democráticos.
De olvidarlo caemos en el peligro de anudarnos a nosotros mismos y tornarnos marionetas, para bailar al son de la misma música, en rebaño.
Biografia de Murrow: http://en.wikipedia.org/wiki/Edward_R._Murrow (en inglés, también disponible en castellano desde la wikipedia)
Y sobre McCarthy: http://en.wikipedia.org/wiki/Joseph_McCarthy (idem)
Sobre el macarthismo o "caza de brujas": http://es.wikipedia.org/wiki/Macarthismo
(Imagen de Wikipedia.)
Saludos
La película va a ser pasada en clase, y he tenido que preparar una pequeña introducción a la misma. Os dejo aquí lo más interesante:
ResponderEliminar-- [...] El contexto es de todos conocido: la "caza de brujas" del senador McCarthy, a principios de los años 50. Ahí va alguna sentencia del periodista Edward R. Murrow, refiriéndose a la histeria acusatoria del momento:
"No hay que confundir desacuerdo con deslealtad. Cuando la oposición leal muera, pienso que el alma de América morirá también".
Y "Nadie puede atemorizar a una nación entera, a menos que todos seamos complices".
Y "No podemos defender la libertad en el exterior mientras nos olvidamos de la nuestra".
De hecho, el mismo Kennan hace hincapié en la idea al final de su Long Telegram, cuando dice:
"Finalmente, debemos tener coraje y confianza para aferrarnos a nuestros propios métodos y concepciones de la sociedad humana.
Después de todo, el mayor peligro que nos acecha al enfrentarnos al comunismo soviético es el de acabar transformándonos en aquello contra lo que luchamos".
Cuanto al objeto de la película...
Cuando en una entrevista preguntan a George Clooney sobre la película, él responde:
"Es un conflicto interesante entre política y periodismo".
Pero no se trata sólo de eso. Cuando le preguntan: ¿Qué esperas de esta película?, contesta: "Un debate abierto sobre la responsabilidad".
Sobre la responsabilidad del periodismo, se entiende; del verdadero periodismo, del periodismo informativo. Un periodismo que debe ser libre para ser responsable, y que tiene por lo tanto la responsabilidad de ser libre. Todos la tenemos, porque: ¿Puede haber una sociedad libre sin prensa (y radio, y TV...: periodismo) libre? Thomas Jefferson dijo:
"Ningún gobierno debe estar exento de censores, y donde la prensa sea libre, ninguno lo estará".
La prensa y los mass media tienen además una gran importancia en la formación de una sociedad, en el comportamiento de la comunidad, en su mentalidad. Desde jóvenes hasta adultos nos bombardean con información durante horas. Pueden formar y fomentar el sentido crítico o hacer todo lo contrario, siendo prácticamente tan importantes como la educación en este sentido. El poder sabe ésto, y hoy como ayer trata de imponerse sobre la televisión; no sólo el poder político, sino también los poderes económicos. Al espectador se le mira más como a un consumidor que como a un ciudadano.
Murrow ya se percató de este peligro (lo veréis en las primeras frases de la película) y sentenció:
"Estamos entre payasos y monstruos; la televisión es un circo, el negocio del show".
Él creía que en el momento en que el entretenimiento dominase en la televisión, ésta ya nada más que serviría para distraer, engañar, divertir y aislarnos de las realidades del mundo. ---
(Las frases incluídas no vienen en la película, sino que han sido extraídas en su mayoría de algunos de los extras que el DVD incluye).
Saludos